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antiago de Compostela, es una ciudad de la provincia de la Coruña, en la región española de Galicia, al noroeste de la península Ibérica, muy famosa por ser lugar de peregrinaje desde el año 921 en que se encontraron allí, las reliquias del Apóstol Santiago el Mayor. A partir de dicha fecha, siempre hubo tres lugares de peregrinación en el mundo, Roma, Jerusalén y Santiago de Compostela. Durante toda la Edad Media tuvo un gran auge, después decayó bastante y en la época actual se ha revitalizado hasta el punto de que llegan anualmente unos doscientos mil peregrinos, entendiendo por tales aquellos que obtienen “la Compostelana”, que te concede la indulgencia plenaria de tus pecados, a través de su tarjeta de peregrino que acredita haber llegado andando y habiendo sellado dicha tarjeta en los lugares intermedios señalados al efecto. Hay muchos caminos para llegar a Santiago de Compostela, como el camino de la Ruta de la Plata desde mi Sevilla, si bien, el más famoso de ellos es el denominado Camino Francés, declarado por la Unesco, Patrimonio de la Humanidad, Itinerario Cultural Europeo, por el Consejo de Europa y ha recibido el titulo honorifico de “Calle Mayor de Europa”. Este camino tiene su origen en el Puerto de Somport, en Huesca y termina en Santiago de Compostela, en total 863 Km.

En la ruta de este camino se encuentra Santo Domingo de la Calzada, municipio de la española comunidad autónoma de La Rioja, famosísima por sus vinos tintos. La ciudad debe su nombre a Santo Domingo, quien la fundo en el siglo XI, cuando se estaba construyendo La Calzada para los peregrinos que iban a Compostela.

Grandes milagros hizo el Santo, pero el de más renombre es el se conoce como “El milagro de la gallina”, que canto después de asada.

Allá por el siglo XIV, el joven alemán Hugonell, iba con sus padres en peregrinación a Compostela, al llegar a Santo Domingo se hospedan en un mesón, donde la lozana hija del mesonero, puso sus ojos en el joven, el casto Hugonell, rechaza las lujuriosas ofertas de la muchacha, lo que provoca su ira y la despechada organiza su venganza, para ello oculta una copa de plata en el equipaje del muchacho, acusándole a continuación de robo. Existían por aquel entonces, unas leyes muy estrictas en los caminos de peregrinación, en este caso promulgadas por el Rey Alfonso X el Sabio, y el desdichado joven es condenado a muerte por ladrón y ejecutado en la horca. Sus padres continúan en peregrinación hacia Compostela sumidos en la más profunda tristeza.

De regreso de Santiago de Compostela, deciden parar de nuevo en Santo Domingo de la Calzada, para rezar por el alma de su hijo. Estando ensimismados en sus rezos, oyen la voz de su hijo, que les dice que en realidad no había muerto, ya que el Santo de la Ciudad, había intercedido por él, dada su inocencia. Los padres en su alegría corren, a la casa del Corregidor, para darle la noticia.

Encontraron le frente a su mesa, a punto de hincar el diente a un suculento gallo y una gallina asados. Burlándose de ellos, les dijo, que su hijo estaba tan muerto como aquellas aves cocinadas, que se disponía a comer. ¡Milagro! Gallo y gallina asados, empezaron en ese momento a danzar y cantar encima de la mesa del corregidor.

Para perpetuar su recuerdo se construye en 1460, dentro de la Catedral y frente a la tumba de Santo Domingo, el que es conocido como “El Gallinero Plateresco”, es una obra de estilo gótico en piedra policromada, que alberga de manera permanente y vivos un gallo y una gallina blancos, que mensualmente son reemplazadas, por los voluntarios de la Cofradía de Santo Domingo. Dice la tradición que los peregrinos que se acercan a las aves y le ofrecen pan, si lo comen es señal de buen augurio, si no de todo lo contrario. Y el mejor augurio para el viaje, era que el peregrino consiguiera una de sus plumas y la luciera en su sombrero.

A partir de esta fecha se incorpora al escudo de la ciudad un gallo y una gallina, y Santo Domingo de la Calzada es conocido como el lugar donde canto la gallina después de asada.

Será un honor para mí, tras contactar con la Cofradía de Santo Domingo, que un Gallo Combatiente Español, Jerezano o Andaluz Antonio Calvo Romero de mi línea Señorito, se establezca en tal histórico lugar.

Antonio Calvo Romero

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